9 mar 2009

Protestas antifascistas reactivan la tensión en Grecia.

Varias marchas de protesta en respuesta al ataque fascista contra el Centro Social de inmigrantes en Atenas terminan con varias sedes nacionales neonazis incendiadas.

Los disturbios han estallado dos veces durante la pasada semana, ambas veces durante marchas de protesta contra el ataque fascista/paraestatal contra el Centro social de inmigrantes de Exarjia con una granada de mano el 24 de febrero.

Durante la primera marcha, a dos días del ataque, un grupo de manifestantes anarquistas se separó del cuerpo principal de la manifestación para atacar la sede de Apogevmatini, un diario ultraconservador que suele atacar consistentemente a los movimientos sociales y laborales, y cuyo editor en jefe, Momferatos, fue ejecutado por la guerrilla 17N a mediados de los 80, por su cooperación con la CIA durante y después de la junta de los coroneles.

La segunda marcha, mucho mayor, que tomó las calles de Atenas el 3 de marzo, terminó en medio de grandes batallas callejeras entre manifestantes y de provocadores agentes antidisturbios que atacaron la mani. Durante los enfrentamientos, que se extendieron por todo el centro de la ciudad, se destruyeron varios bancos y tiendas de lujo. Además los manifestantes irrumpieron en las oficinas de Amanecer Dorado [Xrysi Avgi] una organización neonazi/paraestatal responsable de numerosos intentos de asesinato de inmigrantes, anarquistas y de gente de la izquierda, así como de una campaña de terror contra las infraestucturas radicales.
Las oficinas fueron reducidas a cenizas.

Durante la correspondiente marcha antifascista de protesta en el mismo día en Salónica, estallaron batallas callejeras entre los manifestantes y los antidisturbios por el bulevar central de la ciudad.

Renovada tensión en las calles de Atenas

El viernes 27/2, alumnos de las escuelas públicas del Philothei y Palaeo Psichico, en los barrios más ricos de Atenas, atacaron la exclusiva escuela privada "Athens College", cuna de la clase dirigente del país, bajo el pretexto de la tradicional guerra naranja entre las escuelas locales al final del Carnaval. Los alumnos irrumpieron en la entrada de la escuela, destrozaron la garita del guardia, pintaron lemas y símbolos anarquistas en las paredes. Luego lanzaron petardos y lanzaron naranjas a los autobuses de la escuela. En su esfuerzo por entrar en el edificio principal chocaron con las fuerzas policiales. La policía atacó a los jóvenes y arrestó a un chico de 13 años y a una niña de 12 que fue tirada al suelo. La policía tuvo que liberarlos a ambos cuando los alumnos contraatacaron rodeando a los agentes con la ayuda de la plantilla de profesores que les acusó de brutalidad.

El lunes 2/3, imigrantes afganos y gente local solidaria bloquearon el paseo maríticmo de Patras, levantando barricadas de llamas, después de que un hombre afgano tratara de subirse a la parte trasera de un camión y de que el conductor de otro camión que venía detrás lo viera y acelerase con la intención de atropellarlo. El inmigrante quedó atrapado entre el movimiento de ambos vehículos y está siendo atendido en el hospital con heridas muy graves, mientras que el conductor fue detenido por intento de asesinato. La reacción de más de 1000 inmigrantes afganos fue inmediata, pero enfrentada por una fiera reacción de la policía con la ayuda de elementos fascistas locales. Después de un gran uso de gas lacrimógeno y repetidos ataques brutales por los antidisturbios y sus aliados neonazis, los afganos se vieron forzados a volver a sus chabolas. Durante la represión 4 manifestantes fueron detenidos.

Uno de ellos, griego, fue brutalmente apaleado dentro del furgón policial. Más tarde, en la misma noche, griegos locales evitaron un intento de ataque fascista a las chabolas, lanzando a los elementos paraestatalistas botellas y otros proyectiles desde sus balcones. Patra tiene una larga tradición de organizaciones 'paraestatales' de extrema derecha, incluyendo la banda Kalabokas que en 1991 asesinaron al profesor comunista Temboneras durante el movimiento de ocupaciones contra la reforma educativa de la derecha.

El martes 3/3 a la 1 de la madrugada y llegando a la estación terminal del ISAP en Kifisia, un barrio rico del norte de Atenas, el último tren nocturno del servicio fue atacado cuando pasajeros disfrazados enmascarados salieron de sus vagones gritando eslóganes y derramando gasolina dentro, y procedieron a lanzar cóckteles molotov. El fuego que destruyó completamente el tren a pesar de los esfuerzos de los bomberos, se extendió furiosamente a otros trenes y vagones estacionados y al techo de la estación, dañando las vías de tren y dejando inservibles la estación final, así como las dos siguientes para el futuro.

ISAP había estado subcontratando a K. Kouneva, la limpiadora inmigrante atacada con ácido el pasado diciembre por matones corporativos, y ha sido foco de una continua campaña violenta y no violenta con respecto a los derechos de las limpiadoras. El grupo que reclamó la autoría del ataque del lunes bajo el nombre de "Banda Consciencia" emplazó su acción en el marco de una nueva guerra de guerrillas que círculos del gobierno han llamado "guerra civil de baja intensidad", y conectaron la elección de su blanco con el apoyo a K. Kouneva, y con la muerte de Barns, un joven grafitero que fue electrocutado cuando era perseguido por guardias de seguridad el pasado mes de septiembre en una estación de la ISAP. El grupo habia atacado en el pasado la comisaría de Aegaleo, un barrio proletario del oeste de Atenas.

El miércoles 4/3 por la maána la juventud local se reunió en el lugar del asesinato de Alexandros Grigoropoulos en Exarjia, en el centro de Atenas. Los jóvenes intentaron detener las obras de construcción de una compañía que está intentando levantar un bloque de pisos en un solar cerca del lugar del crimen. En días pasados las infraestructuras habían sido detenidas por manifestantes. Esa mañana, los jóvenes atacaron las máquinas de construcción, quemando un gran bulldozer, lo que llevó a un enfrentamiento con los antidisturbios que atacaron con gases y limitaron los disturbios callejeros a los callejones aledaños. Otro gran solar cerca del lugar del asesinato de Alexandros, que pertenece al Ayuntamiento de Atenas, está siendo reclamado por los vecinos como espacio público, llevando a nuevas tensiones entre los movimientos sociales urbanos con el Ayuntamiento.

El mismo día, los trabajadores de las instituciones de salud mental de toda Grecia, se reunieron en Atenas y levantaron tiendas de campaña fuera del Ministerio de Trabajo exigiendo el pago de sus salarios. Los trabajadores no han sido pagados desde agosto. Las instituciones de salud mental de la Seg. Social griega están sufriendo de una seria falta de financiación y falta de iniciativa política respecto a la des-manicomización de los servicios de salud mental que se ahn quedado a medias.

El sitio arqueológico del Akropolis (el Partenón) permanece cerrado por una huelga indefinida de los trabajadores que piden el pago inmediato de los salarios de 4 meses que les debe el Ministerio de Cultura.

Extraido de:
Especial en La Haine: Revuelta popular en Grecia