25 jul 2008

Reflexiones ante la noticia de la paliza a un inmigrante.

Muy de mañana. Y tanto, así como a las 6'30, en TeleMadrid, cuando aún no ha empezado la programación, en la carta de ajuste conectan con un programa de radio local que cuenta noticias relacionadas con sudamérica. “Cuatro policías llaman a una puerta. Abre un ciudadano. A este le piden la tarjeta de residencia. El ciudadano le dice que no la tiene y cuando se dispone a explicarles que él nunca la llegó a tener pues su padre nació en España, antes de esperar ninguna explicación, los guardias entran en el domicilio atropellándolo y sin ninguna orden de registro ni más nada, le propinan una paliza, de esas que suelen dar quienes van armados y en banda, a una persona sola e indefensa”.

Me indigna la noticia y la busco durante todo el día en la radio. Cambio cada hora de emisora nacional para ver donde la declaman. Pero llega la tarde y la noticia no es noticia. Una vez ya en la casa, voy a buscar la noticia en internet. Pongo “paliza a un inmigrante”y mi sorpresa se acentúa por mil, “384.000”entradas de episodios que se repiten día a día en el territorio llamado España.

Mi primera reacción, es un recuerdo para aquellas imágenes, tan repetidas, de aquel nazi que golpeaba a una inmigrante en un vagón de metro, por la cara y que después llegó a cobrar una exclusiva por una entrevista, lo cual indignò a los demás grupos mediáticos por su auto-falta de cintura, aunque metieron la pata aludiendo a cuestiones éticas y se quedaron sin morbo y sin famoso. “Quzás no saquen estas noticias, para impedir el famoseo de gente tan pestilente”. Es mi primera e inocente reflexión.

Una vez ya pasadas unas horas y bajado al suelo, a este muladal envilecido, mi recuerdo es para aquellos tiempos en los que viví 5 años en Alemania. Allí hubo casos de maltrato a emigrantes españoles, dos o tres casos en esos 5 años y todos fueron un escándalo de los cuales tuvo que pedir publicamente perdón el mismo Canciller, que entonces era Billy Brandt. Cuando sucedía, los españoles se acordaban siempre del pasado nazi de Alemania y reclamaban ser tratados como seres humanos. Hoy añoro aquella Alemania, no se como estará ahora, no se si los medios de comunicación serán de la misma calaña de los de aquí. Pero me extraña que hayan llegado a esta degradación, porque en su momento se cortó por lo sano con el siniestro pasado o por lo menos se escenificó el rechazo de forma muy evidente ante la opinión pública. Aquí, se continuó, aquí el rey juró por el movimiento, aquí el rey no permite la más mínima injuria contra su maestro “el carnicero del Ferrol”, aquí siguen muriendo los genocidas y verdugos en sus camas tranquilitos y rodeados de gloria, mientras miles de desaprecidos siguen enterrados en cunetas y fosas comunes y aún hay partidos que no sólo no han condenado publicamente los 40 años de fascismo, con sus fusilamientos masivos hasta principio de los '70, si no que cada vez ensalzan más esta época, ante la indiferencia de quienes gobiernan, y la ejemplifican ante la extrañeza de unos pocos locos y el regocijo de una cada vez más ignorante masa amorfa de carne tierna.

Mi tercera sensación del día no fue un recuerdo, mi tercera sensación ya de esta noche, es el asco inmenso que siento de pertenecer a este estercolero llamado España.

http://tallerdelascampanas.blogspot.com/

Ataque nazi al CSO La Traba.

Según informan a La Haine los activistas del CSO La Traba, a las 7 de la mañana del 24, un grupo de 5 personas con estética neonazi, lanzando gritos de "Arriba españa", "Heil hitler" y "os vamos a pegar fuego", han atacado el centro social okupado ubicado en la calle Batalla de Belchite 17, Metro Legazpi.

Durante varios minutos han lanzado piedras a la fachada, rompiendo varios cristales, y han intentado acceder al edificio intentando forzar a patadas y apalancando uno de los portones.

Ante la defensa ejercida por los activistas que estaban en el interior, los nazis se han ido retirando varios metros hasta que finalmente se han ido.

Al pié del edificio, entre los restos de los cascotes, se ha encontrado una porra extensible rota, con la que presumiblemente se ayudaron para intentar forzar la puerta, y una navaja abierta.

Desde la asamblea del CSO La Traba se hace un llamado a la solidaridad de los movimientos sociales madrileños y a la resistencia antifascista, así como a estar atentos a próximas informaciones.
Más fotos en La Haine

publicado en KaosenlaRed

21 jul 2008

La victimización del verdugo en Madrid.

La victimización del verdugo en Madrid: Paralelismos entre el tratamiento mediático Israel-Palestina y fascismo-antifascismo.

A Carlos lo mato un día fatídico. A Carlos lo mató una reyerta entre bandas :: La lógica mediático-represiva que fomenta el temor al "violento social" intenta aislar a los movimientos sociales y demonizar sus métodos históricos de lucha ante el resto de la sociedad.

Durante el franquismo se criminalizaba al "rojo" y al “subversivo” para descalificar sus proyectos de búsqueda de una sociedad justa. Ahora, en una pirueta infernal, a los que se enfrentan a la violencia fascista los medios les criminalizan como "violentos", para deslegitimar las luchas sociales por un igualitario reparto de la riqueza.

Disfrazados de servidores públicos de la comunicación social, los consorcios mediáticos que fiscalizan el control político y social son auxiliares complementarios de la "Justicia" (del sistema) y de las "Fuerzas del Orden" en la tarea represiva, y el sujeto a reprimir ya no es el "subversivo” comunista o anarquista sino el "violento social".

Y puesto que en la estrategia de dominación con elecciones, Gobierno Civil y Parlamento, se supone que ya no hay guerra fría ni "subversivos", ahora la primera trinchera de represión a los que amenazan la estabilidad del sistema se hace con medios de comunicación y manipulación orientadora de la conducta colectiva de la clase media bienpensante y despolitizada.

El argentino Manuel Freytas escribió sobre las técnicas de manipulación en el llamado "conflicto" entre el régimen israelí y los resistentes palestinos y libaneses. Los bombardeos escalonados de Israel sobre poblaciones civiles e infraestructuras de Palestina o Líbano, son para la prensa burguesa la "respuesta de Israel" aquejado por una "escalada de violencia", en la que Israel responde a las agresiones "terroristas" de grupos "fundamentalistas" palestinos o libaneses.

En este texto no pretendemos construir un falso paralelismo entre las características de los citados conflictos de Oriente Medio y las características de la lucha antifascista en Madrid, más bien se trata de analizar a los medios de comunicación como instrumentos de lucha de clases, en este caso al servicio de la represión capitalista. La manipulación se mueve sobre cuatro ejes centrales, ejes que sirven para destacar las similitudes con el tratamiento de la prensa burguesa a la violencia neonazi en Madrid.

1) Cuando los medios informan sobre los muertos y heridos (todos civiles, incluidos niños y mujeres) no los relacionan con la "ofensiva israelí" sino que los atribuyen a la "escalada de violencia", con lo cual diluye la responsabilidad de Israel en los asesinatos de civiles. Israel no mata, mata la "violencia".
En el caso del asesinato de Carlos o cuando hay una agresión ultraderechista, no se atribuye a ninguna "ofensiva neonazi” sino a una “pelea entre bandas”, con lo cual pasa a ser un caso aislado o despolitizado, a pesar de que la impunidad y las agresiones han ido en aumento en los últimos años. Los nazis no matan, matan las “peleas de bandas”.

La Razón: "Desde ese fatídico día de noviembre que acabó con la vida de un chico de 16 años, la Policía ha detenido a alrededor de 30 antifascistas relacionados con actos violentos y se ha incautado de numerosas armas. Los altercados protagonizados por la izquierda radical se han multiplicado de forma espectacular a raíz de ese suceso". A Carlos lo mato un “día fatídico”.

El Correo Digital: "Un joven de 16 años muere en una reyerta entre dos bandas en el metro de Madrid. Detenido un 'skinhead' como presunto autor del apuñalamiento mortal ocurrido en una pelea entre bandas neonazis y antifascistas que causó también 7 heridos." A Carlos lo mató una “reyerta”.

2) No presentan el despliegue militar y la escalada de ataques israelíes como una "invasión militar" sino como un despliegue orientado a "terminar con los ataques terroristas", con lo cual diluye la comprensión del acto ilegal de una invasión militar cometida por el Estado judío. Israel no invade, sólo responde a ataques previos.
Cuando el soldado profesional neonazi acuchilló a Carlos, lo hizo porque "se sintió acorralado" por los jóvenes con estética "radical". Cuando la Delegación de Gobierno prohíbe movilizaciones antifascistas siempre se argumenta que lo que se persigue es “evitar altercados”. Cuando la policía barre a porrazos una manifestación antifascista se subraya que previamente “los jóvenes radicales arrojaron botellas y objetos”, con lo cual se diluye la realidad de fondo: se está permitiendo la actividad neonazi y la difusión de ideas xenófobas mientras se reprime a quienes las combaten. Pero al parecer la policía no reprime, sólo responde a ataques previos. Los soldados profesionales no asesinan, reaccionan ante posibles ataques.

El País: En un artículo titulado "El Tribunal Superior autoriza la marcha racista", habla de "Carlos Javier Palomino, de 16 años, en noviembre, cuando se dirigía a reventar una manifestación de DN en contra de la inmigración convocada en Usera. El joven murió acuchillado en un vagón del metro, en la estación de Legazpi, a un kilómetro y medio de donde se celebraba la marcha, apuñalado presuntamente por un ultraderechista." Carlos iba a "reventar" una manifestación autorizada. El soldado profesional "presuntamente" lo apuñaló.

El País: "'Eran muchos y me llamaban nazi', dice el supuesto asesino del menor". En ese caso es “natural” que se defienda.

Telecinco: "El acusado estaba sólo y se vio acorralado por el grupo de redskins. Su reacción fue inmediata, sacó la navaja para defenderse”. Nuevamente se justifica el asesinato, a pesar de que el vídeo del metro muestra cómo el asesino neonazi preparó su cuchillo incluso antes de que el vagón se detuviera e hizo uso de él antes de que tuviera lugar “provocación” alguna.

3) Cuando informan sobre las acciones de la resistencia palestina o libanesa, no las presentan como combates de la resistencia contra las tropas invasoras de Israel, sino como "ataques", o "actos terroristas", contra poblaciones civiles de Israel. Conclusión: Cuando Israel ataca, invade y mata, "responde al terrorismo", y cuando la resistencia se defiende, ejecuta "ataques terroristas" contra civiles israelíes. El invasor pasa a ser el "bueno" y el invadido "el malo".

Cuando los medios informan de un acto de autodefensa contra las agresiones de grupos de ultraderecha, nunca será “en respuesta” a la escalada de acciones violentas previas, sino que será calificado como “oleada de violencia ultra” en un marco de “tensión entre jóvenes skinheads madrileños de tendencia extremista”.

Cuando la policía carga violentamente contra manifestantes para permitir una actividad neonazi y se producen enfrentamientos, entonces los activistas son calificados de “radicales” y “exaltados”. La policía nunca “ataca”, sólo “mantiene el orden y la legalidad vigente” (y protege a la propiedad privada).

La Razón: "Los antifascistas buscan un muerto. La Brigada de Información de la Policía está en máxima alerta ante la oleada de violencia ultra." "Su otro frente abierto es más preocupante. Dar palizas a pequeños grupos o jóvenes solitarios con aspecto o ideología nazi". Como vemos, se transmite que por el “sólo” hecho de tener aspecto nazi, se arriesgan a sufrir la “violencia antifascista”.

El Mundo sobre el soldado profesional: "«Nunca llama la atención», «es muy reservado y correcto», «el típico chico normal del que no se sabe demasiado»". "Los reclutas más jóvenes sí expresaban cierto temor por posibles respuestas de «los redskins» hacia el estamento militar: «Se ha corrido la voz por el cuartel de que nos van a intentar hacer daño de alguna manera, e incluso hay quien piensa que se podrían plantar aquí a intentar atacarnos»". El asesino de Carlos era “un buen chico” y los militares estaban atemorizados por un posible ataque antifascista a los cuarteles.

EFE: "Además de los enfrentamientos registrados en los vagones, la Policía detuvo a otros cuatro jóvenes, tres de ellos menores, cuando se dirigían en «actitud hostil» con «palos y piedras y lanzaban botellas y cócteles molotov» hacia la Glorieta de Cádiz, punto donde concluía el recorrido de la manifestación" de Democracia Nacional. Los fascistas se manifiestan legalmente, los antifascistas son hostiles y lanzan cócteles molotov.

4) En términos bélicos, la prensa burguesa presenta el "conflicto" (no la invasión) como un "enfrentamiento" entre el ejército de Israel y las organizaciones de la resistencia. Omite el siguiente detalle: Israel es una superpotencia militar, con un ejército disciplinado, dotado de armamento y logística de última generación. La resistencia es sólo una fuerza de guerrilla compuesta por militantes, con casi nada de logística y sólo armada con fusiles livianos y cohetes de alcance reducido, de fabricación doméstica y precaria.

La prensa calificó el asesinato de Carlos como una “pelea de bandas”, no como un escalón en la actividad terrorista de la ultraderecha. Mientras se habla de “bandas”, se desvirtúa que el asesino de Carlos, como muchos otros agresores fascistas, había sido entrenado en el ejército español. Se disimula siempre que sea posible, el hecho de que no ha habido depuración alguna después de la Transición y por tanto las Fuerzas de Seguridad del Estado son herederas del régimen franquista; es decir, hay conexiones con los neonazis, políticas, ideológicas, económicas, familiares. Por si fuera poco, además de la cobertura mediática cuentan con la policía que los defiende o hace la vista gorda y con el sistema judicial y las multas para disuadir a los que protestan. Mientras tanto, la juventud antifascista es obrera, sin más espacios de autoorganización que algunos locales y centros sociales okupados y sin ningún tipo de “respaldo institucional”.

20minutos: "Disturbios y cargas contra manifestantes extremistas de izquierda en la Gran Vía. Destrozos de mobiliario, cristales y coches ha sido el resultado." "Por su parte, la manifestación de las Juventudes del partido ultraderechista Democracia Nacional, que desde las 12:00 horas del domingo marchó entre la Plaza de Cibeles y la Puerta del Sol bajo el lema 'Vivienda Social, Prioridad Nacional. Ningún español sin casa', transcurrió sin incidentes." Los manifestantes extremistas de izquierda destrozan el mobiliario "de todos" y se enfrentan a las fuerzas del orden. La manifestación de las Juventudes del partido ultraderechista Democracia Nacional, de los amigos del asesino de Carlos, reclama vivienda social y transcurre sin incidentes.

ABC, febrero 2007: "El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha reclamado chalecos antibala y más medios de autoprotección para los efectivos que se desplacen a reforzar la seguridad en Alcorcón, donde desde hace una semana se han incrementado las fuerzas del Estado en prevención de nuevas reyertas." Precaución muy necesaria ante la posibilidad cierta de que la asamblea antirracista y por la convivencia pacífica de Alcorcón utilice armas y fuego real.

Libertad Digital: "Un sitio web de cobertura al gamberrismo fanático, La Haine, sirve de portavoz a estas agresiones, perpetradas para recordar el asesinato, hace cinco meses, de Carlos Javier Palomino, un joven de 16 años que fue apuñalado tras una manifestación celebradas por grupos ultras de derechas." Antifascismo = gamberrismo fanático; fascismo = grupos ultras de derechas.

Para la prensa madrileña los nazis no son “ultras” por las ideas que defiende ni por sus métodos cotidianos, sólo lo son cuando se pasan de la raya o cuando interesa poner al mismo nivel su actividad con la de colectivos antifascistas. Cuando los medios hablan de "enfrentamiento" entre fascistas y antifascistas, o de "guerra" entre Israel y los resistentes, lo que hace es poner a la pulga y al elefante en un mismo nivel, eliminando las fronteras entre la víctima y el victimario.

Madrid, 21 de julio de 2008

COORDINADORA ANTIFASCISTA DE MADRID

http://www.nodo50.org/antifa/index.php?option=com_content&task=view&id=328&Itemid=1

La comunicación represiva o cómo se legitima la represión contra el antifascismo madrileño.

En los últimos meses, los medios de comunicación burgueses y la televisión basura están desarrollando un ejercicio básico de comunicación represiva: repiten sistemáticamente eslóganes como si de vender un detergente se tratara, pero en este caso machacando con que “los extremismos son iguales”, con el objetivo de legitimar la represión contra el movimiento antifascista.

La guerra psicológica o comunicación represiva, en su actual acepción, comenzó a aplicarse masivamente tanto a partir de los procesos de democracia "formal", que sustituyeron (en forma de dominación neoliberal) a las dictaduras militares de América Latina, como en el proceso de colonización de Palestina por el régimen israelí.

En su definición técnica, la comunicación represiva sería el empleo planificado de la propaganda, orientado a direccionar conductas en la búsqueda de objetivos de control social, sin recurrir al uso (o bien como apoyo sicológico) de las armas. Es decir, consiste en desarrollar una estrategia de dominación a través del consenso social impuesto sin el uso aparente de las armas, dado que estamos en un “Estado de Derecho”.

Su funcionamiento no difiere de las técnicas de acción comunicativa utilizadas en la publicidad comercial, cuando se pretende vender un teléfono móvil, promocionar una película taquillera o la canción del verano. Lo que varían son los objetivos. La publicidad impone la “necesidad” de consumir determinados productos.

La comunicación represiva impone la “necesidad ciudadana de defenderse”, ya sea de los gobiernos que no siguen al pie de la letra los dictados de EEUU (caso Irán) como de los movimientos sociales en lucha por una sociedad justa (caso Madrid, entre muchos otros movimientos del Estado español), apelando para ello desde la criminalización de estos movimientos hasta golpes de Estado.
Lo que busca el sistema es que la gente asuma como “necesarias” las acciones represivas contra blancos señalados como "enemigos".

Los "enemigos" son, para los medios burgueses, los que se oponen a los proyectos colonizadores del capitalismo transnacional, sea en el Estado español, en América Latina, en Oriente Medio u otros lugares. En el ámbito local, los movimientos sociales que luchan contra el avance del fascismo, por los derechos de los inmigrantes, por la vivienda, por la sanidad digna. Por todo aquello que se opone al neoliberalismo que intentan imponernos.

Demócratas vs. Violentos
La comunicación represiva, al igual que la publicidad comercial, opera por medio de eslóganes repetitivos que se fijan en el inconsciente de la gente. Esos eslóganes cumplen la tarea de evitar que la gente tenga una conciencia propia y reflexione con independencia de la presión del capital y del Estado.
En este sentido, la legitimación de la represión contra el movimiento antifascista, los porrazos y la continua prohibición de manifestaciones, está siendo explicada mediáticamente a través dos consignas antitéticas machacadas sobre el cerebro de las personas: demócratas vs. violentos. Lo mismo ocurre en otros conflictos políticos.

Para la prensa:

Palestinos = "violentos", mientras que Gobierno Israelí = "democracia".

Antifascistas = "extremistas", mientras que Represión y Prohibiciones de manifestaciones = "democracia".

Independentistas de izquierdas = “terroristas”, mientras que Tortura e Ilegalizaciones = “democracia”.

Huelguistas = “violentos”, mientras que Precariedad Laboral y Paro = “democracia”.

Su manipulación constante está destinada a separar el "envase" del "contenido". Venden "democracia", pero no muestran su por qué y su para qué. Venden "los violentos", pero no muestran su porqué ni su para qué. En síntesis, venden el envase, la marca, pero no muestran el contenido del producto. Día a día en la publicidad comercial se intenta vender una marca, un logo, más allá de que el contenido del producto (ropa, el seguro de un coche, etc) sea igual a otros, parecido o incluso peor. Así mismo, en las elecciones presidenciales, por ejemplo, no se debate sobre el programa político de cada candidato o sobre cómo van a resolver los problemas de la gente, sino sobre la imagen que se quiere mostrar, sobre los eslóganes que cada uno transmite en la televisión y los espacios propagandísticos. Se promociona la forma y no el fondo.

En este sentido, ¿cuáles son las cualidades de la comunicación? Principalmente tres: la rapidez (la información debe ser corta, con títulos directos como mensajes publicitarios); la sencillez (máximo de comprensión); y el entretenimiento / sensacionalismo (el aburrimiento es un peligroso adversario). De hecho, cuando estas tres cualidades se repiten conducen inevitablemente a una concepción infantil del pensamiento. En la comunicación capitalista y en especial en la comunicación represiva, hay un proceso de infantilización de los mensajes.

Los eslóganes, columna vertebral de la acción comunicativa planificada, permiten direccionar la conducta de la gente hacia el objetivo propuesto. Por ejemplo: "jóvenes violentos" o "antisistema", repetidos constantemente por los medios de comunicación masivos, buscan legitimar esos eslóganes como una "verdad" aceptada por toda la sociedad.

Cuando esos eslóganes, repetidos día y noche a través de imágenes, audio y palabras escritas, calan en una porción mayoritaria de la sociedad, entonces se pasa a un segundo nivel táctico de acción: por el mismo método repetitivo, se imponen consignas movilizadoras para conseguir el objetivo señalado (en este caso la criminalización del antifascismo).

Campo "amigo" y campo "enemigo"
La comunicación represiva, al igual que la publicidad comercial, opera sobre los deseos y los temores de la sociedad. Por lo tanto, y como sucede en una guerra militar, define un campo "amigo" y un campo "enemigo".


A través de los eslóganes y las consignas, se fijan pautas morales inconscientes, sobre el "bien" (el campo amigo), o el "mal" (el campo enemigo). Por ejemplo, “demócratas“ = Bien; “antisistema” = Mal.
A partir de allí, se direcciona la acción comunicativa. "Violentos antisistema" consolida la imagen del campo "enemigo". "Incrementar la represión", consolida el consenso social del "campo amigo" contra el "enemigo común" (antifascistas o antisistema).

La manipulación mediática no se hace por medio de ideas o reflexiones, sino por medio de "órdenes" subliminales que se fijan inconscientemente en la gente. Esto explica, en parte, por qué incluso algunos sectores combativos de los movimientos sociales llegan a dudar de la legitimidad de la lucha contra el neonazismo, encarnada en la figura, masivamente "desprestigiada", de los antifascistas.

Por medio de la acción mediática masiva se pretende convertir a la movilización antifascista en enemiga del “sistema democrático”, impuesto como valor de "bien" supremo, y por encima de sus contenidos representativos reales, en lo económico, político y social. Que no son otros que los planes de ajuste y la explotación capitalista financiera.

Madrid, 17 de julio de 2008

COORDINADORA ANTIFASCISTA DE MADRID

http://www.nodo50.org/antifa/index.php?option=com_content&task=view&id=326&Itemid=1

Notas sobre el ascenso del fascismo en los Estados Unidos.

Rosenberg, uno de los ideólogos del nazismo, definía a los Estados Unidos como «un espléndido país del futuro» que tenía el mérito de formular «la nueva idea de un Estado racial».

La derecha europea –con destaque en los llamados atlantistas, defensores inflamados de la OTAN y de la presencia de las tropas de los Estados Unidos en Europa–, insiste en atribuirle un sentimiento de “antiamericanismo” a la ola de protestas contra la estrategia de dominación mundial de aquel país. La acusación no tiene fundamento. La condena de la política imperial de los Estados Unidos no involucra a su pueblo.

En septiembre y octubre de 2001, durante la agresión norteamericana contra el pueblo de Afganistán, publiqué en Portugal y en América Latina una serie de artículos en los que, reflexionando sobre la matanza de Mazar-i–Charif y el saqueo de Kandahar, alertaba respecto a una amenaza a la humanidad que empezaba a esbozarse: la posibilidad de la emergencia en los Estados Unidos de un fascismo de nuevo tipo. Sus contornos, aún mal definidos, se identificaban en el componente militar del sistema de poder de la gran república y en su ambición de imponer un proyecto de dominación planetaria, perpetuo.

En las comunicaciones presentadas en la II y III edición del Forum Social Mundial, en Porto Alegre, retomé el tema, y llamé la atención respecto a una crisis global de civilización, política, económica, militar, cultural y ambiental.

El peligro del neofascismo en los Estados Unidos crecía. En el cuerpo de oficiales de sus fuerzas armadas tomaba forma un fascismo castrense, que se expresaba a través de la participación de estructuras de comando en crímenes contra la humanidad, en misiones genocidas de la fuerza aérea, en el discurso mesiánico y racista de generales y almirantes.

La vieja tesis de la nación predestinada, la única capaz de salvar la humanidad, fue asumida por el presidente Bush, que hace de ella la columna maestra del Nueva Orden Mundial, cuyos principios fueron reformulados después del 11 de septiembre. Una concepción maniqueísta de la vida fue puesta al servicio de la estrategia imperial de vindicta. La lucha contra el terrorismo pasó a servir de soporte a una política de terrorismo de estado. El presidente informó al mundo que el Señor no era neutral, y apoyaba su política. Y advirtió: quien no concordara con ella sería considerado enemigo, y como tal tratado. Ese discurso trajo a la memoria arengas de Hitler en vísperas de la invasión de Polonia. Su agresividad e irracionalidad configuraron un asalto a la razón.

He sido uno de los primeros escritores que ha utilizado la expresión IV Reich para denunciar la amenaza –al conjunto de la humanidad y a la propia continuidad de la vida en el planeta– que la estrategia de la Casa Blanca carga en sí.

Me permito transcribir algunos párrafos de lo que afirmé entonces en el II Forum Social Mundial, en Porto Alegre:
“Las simientes del fascismo ya han contaminado, es innegable, a muchos pilotos y oficiales de la US Army presentes en el escenario de horrores de Afganistán (…) El peligro de un fascismo de nuevo tipo se torna difícil de identificar porque presenta características inéditas:

1. No se encuadra en las definiciones clásicas del fascismo.

2. Surge como inseparable de la dinámica agresiva de un poder imperial, y como efecto de la propia lógica de la violencia desencadenada por las fuerzas armadas de ese sistema.

3. Siendo un fenómeno que se enraíza en el cuerpo de oficiales, presenta la peculiaridad de, al estructurarse y fortalecerse, se extiende de afuera hacia dentro, o sea, de la periferia hacia los Estados Unidos, corazón del sistema.

“La dificultad para admitir que la actual política de terrorismo de estado de los Estados Unidos amenaza desembocar en el neofascismo reside en el carácter y la tradición de las instituciones norteamericanas y en la atipicidad de la ideología subyacente a las acciones de genocidio practicadas con frecuencia cada vez mayor por un poder militar hegemónico. El hábito de asociar el fascismo casi mecánicamente, como modelo de Estado, a la Alemania de Hitler y a la Italia de Mussolini, lleva a olvidar que su implantación asumió formas muy diferenciadas y que tanto el asalto al poder como el funcionamiento del sistema no caben en definiciones rígidas.

“El fascismo, tanto en Europa como fuera de ella, no obedece a un modelo único. Si en el III Reich y en Italia (ahí solamente al inicio) contó con fuerte apoyo de masas y tuvo como instrumento partidos que seguían ciegamente o líderes carismáticos, tal cosa no tuvo lugar en la España de Franco, ni en el Portugal de Salazar.

Ni en la Hungría de Horthy, ni en la Rumanía de Antonescu, ni en la Croacia de Ante Pavelich, donde fueron, sobre todo, aspectos básicos de la organización del Estado que tomaron como fuente de inspiración los modelos alemán e italiano. El denominador común de todos los fascismos lo identificamos en el nacionalismo irracional y agresivo con componente racista, en la tentativa de imponer una contracultura, y en la creación de aparatos represivos del tipo Gestapo. En el orden económico las diferencias fueron nítidas (…)

“El caso de Chile, por ejemplo, es un tema de reflexión inagotable, tanto por lo que en él hubo de especifico en el terreno político, económico y militar, como por sus contradicciones. Aquellos que definen la dictadura terrorista de Pinochet, en la teoría y en la práctica, como fascista, sustentan –en mi opinión con fundamento– que las fuerzas armadas desempeñaron allí el papel que en el Reich alemán fue asumido por el partido nazi y por los aparatos policiales por él creados.

El fenómeno chileno ayuda a comprender, en un contexto diferente y en otra dimensión, la amenaza neofascista que el terrorismo de estado estadounidense carga en el vientre. El peligro ahora es planetario y, repito, nace en cierta medida lejos de la sociedad cuyo sistema de poder lo generó. Las expediciones punitivas no toman como blanco a las minorías de los partidos de izquierda o las organizaciones sindicales. El enemigo, imaginario, fabricado, es ahora otro: individuos transformados en gigantes demoníacos y, sobre todo, pueblos paupérrimos, distantes y desarmados”.

La transcripción fue larga, pero útil. Han transcurrido casi siete años desde que escribí esas líneas. El desarrollo de la historia ha confirmado las aprensiones que entonces manifestaba. La crisis de civilización se ha agravado mucho.

Afganistán ha sido transformado en un protectorado con la aprobación del Consejo de Seguridad de la o­nU. Los Estados Unidos han transferido a la OTAN las responsabilidades de la ocupación militar del país, y más de 60 mil hombres de aquella organización se han encontrado allí envueltos en una guerra perdida.
Osama bin Laden y el mullah Muhamad Omar – apuntados como objetivo prioritario de la invasión–, no han sido encontrados y se hallan en paradero desconocido. L a producción de opio aumentó y la soldadesca norteamericana es responsabilizada por el propio gobierno del presidente fantoche Hamid Karzai –ex-funcionario subalterno de una compañía petrolífera estadounidense- de masacrar civiles en operaciones de rutina. En algunos casos, en las órdenes de combate, oficiales de los Estados Unidos desaconsejan la captura de prisioneros. No quieren sobrevivientes. En Seberghan fueron cortadas las lenguas a mujahedines que se habían rendido.

En Iraq, la indignación mundial suscitada por las revelaciones de las torturas infligidas a resistentes iraquíes en Abu Grahib no se tradujo en la condena de oficial superior alguno. El presidio fue clausurado, pero los responsables de los abyectos crímenes allí cometidos quedaron impunes, para empezar, por el ex secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, que tenía -como quedó probado- conocimiento minucioso de lo que pasaba en Abu Grahib.

Musulmanes capturados no Iraq y en Afganistán, y acusados de «terroristas», fueron transportados en vuelos clandestinos de la CIA hacia campos de concentración instalados en países africanos y del Este de Europa. El gobierno portugués fue cómplice de ese crimen. No obstante que los vuelos fueron confirmados por gobiernos de la Unión Europea, Washington ignoró el escándalo.

Más grave aún: Bush logró que el Congreso de los Estados Unidos, ahora con mayoría demócrata, aprobara la legislación que, en la práctica, permite la tortura. La guerra en Iraq está también irremediablemente perdida pese al aumento de 160 mil hombres del ejército de ocupación. Un ejército paralelo de mercenarios altamente remunerados está asumiendo un papel cada vez más importante en las operaciones militares.

La situación es caótica. El presidente Bush fue finalmente obligado a reconocer que Iraq no disponía de armas de exterminio masivo -pretexto para la agresión-, pero insiste en defender la ocupación del país por tiempo ilimitado.

El balance de la agresión es terrible. El Iraq de hoy es un país arruinado y famélico. Sus ciudades fueron semidestruidas, saqueados museos maravillosos que guardaban la memoria de las milenarias civilizaciones de la Mesopotamia. La barbarie imperialista no respeta la cultura: blindados estadounidenses convierten el área de las ruinas de Babilonia en zonas de estacionamiento.
No hay estadísticas confiables sobre el costo en vidas humanas de la guerra genocida. Mas los propios medios de los Estados Unidos admiten que, hasta finales de 2007, más de 100 mil civiles iraquíes habían muerto como consecuencia de ella.

El TUMOR FASCISTA SE DISEMINA
Las «guerras preventivas» recuerdan a ciertas epidemias. No es fácil evaluar los efectos de la contaminación, pero, como era inevitable, las metástasis del tumor fascista se diseminan por el cuerpo de la nación.
En el plano interno la defensa e implementación de una estrategia planetaria peligrosamente agresiva e irracional exigirán cambios en la acción gubernativa que golpearon fuertemente la estructura institucional del país, abriendo en ella fisuras por las cuales avanza el fascismo.

Inmediatamente después del 11 de septiembre, la mayoría de la población no se percató de que el discurso bushiano contra el terrorismo funcionaba como anestésico para golpes quirúrgicos que herían garantías y libertades constitucionales. La destrucción de las torres de Manhatan fue invocada a despropósito para justificar una feroz ola de xenofobia que llevó, por ejemplo, a la creación de tribunales militares para enjuiciar a extranjeros sospechosos, a las persecuciones y humillaciones infligidas a inmigrantes musulmanes, a la cacería de brujas en las universidades, a la desaparición de clásicos de la literatura en las bibliotecas públicas, a gestos tan simbólicos como la prohibición de la canción de John Lennon en defensa de la paz.

El Patriot Act, la ley ultra reaccionaria promulgada por George Bush, es un diploma que hubiera merecido la aprobación del III Reich de Hitler. Gente íntima del Presidente, como el vice Cheeney, Rumsfeld, Condoleeza Rice, Paul Wolfowits, Perle, entregaron una significativa contribución a la radicalización de un discurso oficial de matices fascistizantes, no obstante que algunos de los que lo cultivan no lo perciban, por indigencia cultural. Muchos generales del Pentágono ya se habían anticipado.

El engranaje que abre camino al neofascismo no hubiera podido servir con eficacia a la estrategia de dominación si no dispusiera, como formidable y decisivo instrumento para manipular las conciencias, de un sistema mediático que hoy ejerce el control hegemónico de los grandes órganos de comunicación social.

El tema ha sido tratado exhaustivamente por autores como Chomsky, Ramonet y Chossudovsky, pero la complejidad y gravedad de los estragos producidos por el funcionamiento de esa máquina diabólica hacen indispensable que el asunto se retome permanentemente.

El discurso clásico sobre los Estados Unidos como tierra de la libertad de expresión siempre fue construido a partir de no verdades. Hoy es ridículo. Las tres grandes cadenas de televisión que emiten noticias durante 24 horas –NBC, FOX y CNN– mantienen lazos íntimos con el Poder. La gran mayoría de las noticias que difunden provienen de fuentes del gobierno o corporativas. El mantenimiento de los índices de audiencia exige no tanto de un buen relacionamiento con esas fuentes como de la inclusión de noticias sobre asuntos divertidos, historias sobre guerras que hagan la apología del heroísmo norteamericano, la eliminación de temas considerados incómodos, un gran volumen de informaciones vinculadas a negocios, el deporte, el sexo, la situación de las grandes transnacionales, comentarios superficiales sobre ciencia, medio ambiente y arte.

Los periodistas que no se someten y se rehúsan a colaborar con el Poder son castigados, directa o indirectamente, o despedidos por la gran media, no importa que sean celebridades, como ocurrió en el caso del neozelandés Peter Arnett, de la NBC. En un país donde un abismo cultural separa a las élites del ciudadano común, la militarización de la sociedad civil, en desarrollo, asume proporciones inquietantes.

Según John Bilis -un reconocido analista militar-, la militarización de las conciencias se ha tornado imprescindible al buen funcionamiento del sistema. El establishment está empeñado en preparar a la sociedad civil para la aceptación de la violencia como fenómeno natural. Mientras que el militarismo era tradicionalmente encarado «como una serie de creencias circunscritas a grupos sociales específicos, la militarización utiliza una serie de mecanismos que envuelven todo el edificio social».

El avance de la militarización en las escuelas es alarmante. Contamina a la juventud. Una publicidad chocante en la televisión, en la prensa plana, en la radio, en carteles fijados en las paredes, presenta a las fuerzas armadas como escuela de virtudes. El cuerpo de marines cultiva el auto elogio, y se presenta como una tropa de super hombres.

La militarización de la sociedad es acompañada de un discurso político que transforma la dureza, la insensibilidad y un concepto prusiano de la disciplina en virtudes. La tesis de «letal y solidario» ilumina bien una mentalidad patológica. Peter Mass, en un artículo publicado por The New York Times, cuenta que cerca de Bagdad, el comandante de un escuadrón de blindados, cuando sus soldados dispararon contra vehículos civiles, exclamó: «Mis hombres no tuvieron clemencia. ¡Formidable!» En las grandes ciudades, entre la juventud de los barrios de la clase media, un entretenimiento de moda es el painball, un juego durante el cual los participantes luchan salvajemente. La muerte simulada hace parte del choque.

El presidente Bush considera «viriles» esos juegos violentos. Para estimular el espíritu marcial le gusta mucho discursar en bases militares, en fábricas de armas y en portaaviones.

En esta atmósfera de apología de la violencia como virtud patriótica, la crítica a la ideología del poder sólo es asumida permanentemente por una minoría de intelectuales corajudos. Pero la contribución de estadounidenses progresistas como Ramsey Clark, Noam Chomsky y James Petras ha sido muy importante para la comprensión del peligro fascista y el funcionamiento de un sistema de poder que no duda en pasar por encima de la Constitución para limitar o suprimir derechos y libertades.

RAÍCES DEL FASCISMO EN LOS ESTADOS UNIDOS
La influencia ejercida por la extrema derecha estadounidense en el pensamiento fascista continúa siendo muy mal conocida. Pero fue importante.

Ho Chi Minh ha sido uno de los primeros comunistas en identificar el parentesco ideológico existente entre ambos. Cuando era un joven marinero presenció en el sur de los Estados Unidos el linchamiento de un negro y el ritual siniestro del crimen, tolerado por las autoridades. Lo impresionó tanto que en un artículo publicado en 1924 en el órgano francés de la Internacional Comunista afirmó que el Ku Klux Klan asumía toda «la brutalidad del fascismo».

Una abundante documentación demuestra además, con claridad, que el partido nazi alemán, en los años en que Hitler preparaba el asalto al poder, tuvo como fuente permanente de inspiración a los movimientos reaccionarios y racistas de los Estados Unidos.

Rosenberg, uno de los ideólogos del nazismo, definía a los Estados Unidos como «un espléndido país del futuro» que tenía el mérito de formular «la nueva idea de un Estado racial».

El genocidio de los indios era presentado en el III Reich como una epopeya civilizatoria, y el proyecto de germanización de parte de Europa Oriental como una cruzada que tenía su precedente en la conquista americana del Far West. Hitler, en 1939, en vísperas de la guerra, enalteció «la inaudita fuerza interior» del modelo americano de civilización.

Un libro del escritor racista estadounidense Lothrop Stoddard –The menace of de under man- fue traducido al alemán y suscitó también tanto entusiasmo en los medios nazis que el autor fue invitado a visitar el Reich donde fue recibido por Hitler. Cabe recordar que el referido libro también fue elogiado por dos presidentes de los EE UU, Harding y Hoover.

El filósofo marxista italiano Domenico Losurdo desarrolla el tema de los orígenes americanos del fascismo en un escrito que presentó en Florencia en mayo de 2003. En ese trabajo (ver en odiario.info) cita textos de Theodore Roosevelt en los cuales aquel ex-presidente de los Estados Unidos hace la apología de las «razas superiores», y sugiere soluciones radicales para defender a la civilización del peligro representado por las «razas inferiores».

Losurdo dedica especial atención al papel desempeñado por Henry Ford en las campañas antisemitas. El magnate de la industria automovilística fue entonces muy elogiado en la Alemania nazi. Hitler, el cerebro de la «solución final» afirmó que para él la lectura de un libro de Ford fue una «revelación para los nacional-socialistas» porque los ayudó a comprender «el peligro del judaísmo».
Un sistema mediático perverso falsifica tan ampliamente la historia que cientos de millones de personas continúan viendo en los Estados Unidos un estado democrático, que respeta las libertades y los derechos humanos.

Los fundadores de la nación son presentados como héroes de la humanidad. La mentira fue erigida en verdad. Creo que pocos brasileños saben que los autores de la Declaración de Independencia y de la Constitución de los Estados Unidos eran, todos, propietarios de esclavos. Y propietarios de esclavos fueron casi todos los presidentes de la Unión en los primeros 36 años de existencia de los Estados Unidos.

Un comunista norteamericano, James West, escribió en 1977 un ensayo que, por su significado, estimo oportuno recordar en este foro. En él llamó la atención a una realidad también olvidada: los orígenes del eurocomunismo son también norteamericanos. James West demuestra en ese trabajo que el browderismo, la doctrina de un ex secretario general del Partido Comunista de los Estados Unidos, no sólo tuvo un efecto devastador en América Latina al condenar como supuestamente de derecha el combate al imperialismo, sino que funcionó como fuente de inspiración ideológica para el movimiento que en Europa contribuyó decisivamente a la destrucción o la social-democratización de muchos partidos comunistas, entre ellos el italiano, francés y el español.

Camaradas: Peligros enormes se anuncian en el horizonte de las luchas. Mas el gigante americano tiene pies de barro. Los mecanismos predatorios de la globalización neoliberal no bastan para resolver la crisis estructural de un capitalismo senil. Entre tanto, la tarea prioritaria y permanente para las fuerzas progresistas, y en primer lugar para los comunistas, es hacer frente, en todo el mundo, con firmeza y lucidez, a la amenaza que representa para la humanidad la estrategia neofascista de un sistema de poder que aspira a militarizar la Tierra. El proceso de militarización y fascistización de la sociedad estadounidense prosigue. Y esa realidad no puede ser ignorada.

El combate hace más necesaria que nunca la unidad de los comunistas.

http://www.boltxe.info/berria/

Hace 75 años se firmó el hermanamiento entre los nazis y el Vaticano.

Se cumplen 75 años del Concordato del Reich entre el Vaticano y la Alemania de Hitler que dio una gran propaganda al régimen y fue considerado como beneficioso para la Santa Sede contra el comunismo.

El concordato fue firmado el 20 de julio de 1933 en el Vaticano por el cardenal secretario de Estado, Eugenio Pacelli, el futuro papa Pío XII, y el vicecanciller alemán, Franz Von Papen.
La firma se produjo seis meses después de que Hitler fuera elegido canciller.

Considerado uno de los concordatos que más apreciaciones diferentes ha tenido entre historiadores y vaticanistas, el acuerdo todavía sigue en parte en vigor, después de una sentencia del Tribunal Constitucional Federal alemán de 1957.Hasta 1933, el Vaticano mantenía concordatos sólo con estados alemanes como la católica Baviera, Prusia y Baden -que aún siguen- pero no con el estado alemán como tal.

Según contó a la agencia católica Zenit el jesuita Peter Gumpel, relator de la causa de beatificación de Pio XII, Hitler ofreció un acuerdo al Vaticano, cuyas cláusulas eran 'muy favorables' a la Santa Sede.Por aquellos años, el comunismo crecía y era visto como un peligro por el Vaticano y aunque en la Santa Sede se miraba con recelo a Hitler también algunos pensaban que el régimen alemán recién instaurado serviría de dique.Aunque el concordato contemplaba que la Iglesia tenía derecho a erigir escuelas de filosofía y de teología, que dependerían 'exclusivamente de la Autoridad Eclesiástica', la contrapartida era en realidad muy dura para la Iglesia local.Y es que el artículo 14 precisaba que antes del nombramiento de los obispos y arzobispos había que comunicar al Reich el nombre del escogido para 'constatar' que no existían contra el mismo 'objeciones de carácter político general'.No era el único. El artículo 16 señalaba que los obispos antes de tomar posesión de sus diócesis tenían que prestar juramento de fidelidad ante el Reich, comprometiéndose 'a respetar y hacer respetar' al Gobierno establecido y a 'tratar de impedir todo daño que pueda amenazarlo'.
Según los expertos, los prelados quedaban maniatados, renunciando en la práctica a cualquier oposición a la dictadura.

El concordato, según los historiadores, ofreció al régimen nazi su mayor éxito de propaganda exterior y a la vez sirvió para desarticular al catolicismo político, cuya voz era el partido del Centro Católico.

Según el jesuita Gumpel, a pesar de la firma del acuerdo, en la Curia Romana 'todos' sabían que Hitler no lo respetaría.Cuenta al respecto que el cardenal Pacelli fue preguntado en aquellas fechas por un diplomático británico si el líder nazi respetaría el concordato y su respuesta fue tajante: 'absolutamente, no. Lo único que podemos esperar es que no viole todas las cláusulas a la vez'.

El actual Papa de Roma, Benedicto XVI, formó parte de las juventudes hitlerianas en su juventud en 1941-1942, según su autobiografía.

Kaos

Ataque fascista en Soto del Real.

El pasado lunes 15-07-08, fue atacado y reventado el que será el futuro Centro Social Okupado y Autogestionado “El Kou” en Soto del Real por un grupo de nazis.

Después de un mes de duro trabajo, por las personas que depositaban en este proyecto toda su buena voluntad y esperanza, el grupo nazi que entró a desvalijar la casa no tardó ni una hora en destruir los pilares de un sueño.

Éstos reventaron el pequeño almacén que se había instalado, llevándose todas las herramientas que se encontraban en su interior. Por suerte en ese momento no había nadie en el interior y sólo hay que lamentar pérdidas materiales. El pequeño almacen fue el primer objetivo de este ataque, pero mientras unos se ocupaban de esta tarea, otros tuvieron tiempo de pintar las paredes con frases amenazadoras, desafiantes y agresivas como “skins soto, primer aviso”, “hos vamos a matar” (literalmente escrito con H), “Pollo jodete”, etc.Desgraciadamente, no es nada nuevo que los nazis hagan sus correrías a sus anchas en Soto del Real.

Mientras el ayuntamiento da máxima prioridad a la limpieza de las pintadas contra su gestión o contra la cárcel, se ha podido leer durante meses pintadas como “Soto sigue siendo fascista” o “Pollo muerto, Soto contento”. Ahora atacan contra lo que será un nuevo centro social, con el más que seguro beneplácito de las autoridades locales (Recordar el “pasado” fascista y nazi de algunos de los miembros de la policía municipal).

Y mucho mas grave que todas estas “pequeñas” fechorias nazis, son las inumerables palizas que este grupo ha propinado a mas de una persona en las calles de soto. La seguridad no se consigue con un mayor numero de policias....

La seguridad es el esfuerzo de todos por conseguir un lugar pacifico, un lugar en el que la convivencia sea algo primordial. La seguridad no se puede conseguir con grupos de jóvenes (y no tan jóvenes) que patrullan por el pueblo (posiblemente con armas blancas) en busca de violencia. Si queremos vivir tranquilos entonces no queremos vivir con violentos.Con esto queremos pedir el máximo apoyo posible para acabar con la impunidad de la que esta gentuza goza y terminar de una vez por todas con los que no dejan vivir en paz a los demas.

Salud!!

Extraído de KaosenlaRed

La violencia policial como aliada de la actividad neonazi en Madrid.

En los últimos meses hemos visto cómo los medios de comunicación arremeten contra el movimiento antifascista utilizando calificativos de “bandas violentas” y mostrando imágenes de contenedores ardiendo y enfrentamientos contra las Fuerzas de Seguridad del Estado.Pero nuevamente los medios de comunicación tergiversan intencionadamente la realidad y empiezan la casa por el tejado.

El objetivo de contar la historia de la lucha antifascista en Madrid partiendo de los contenedores ardiendo es una manera de ocultar el verdadero conflicto existente y, sobre todo, ocultar el papel de violencia política organizada que ejerce la Policía contra el movimiento antifascista. Esta violencia cumple un rol fundamental a la hora de permitir la proliferación de actividades neonazis en la capital del reino.

El pasado 11 de noviembre de 2007, en ese mediodía sangriento en que Carlos Palomino fue asesinado por un militar neonazi, cientos de antifascistas pretendían realizar un bloqueo de la manifestación xenófoba convocada por el partido Democracia Nazional en el distrito de Usera. Cuando por encima de la mortal agresión a Carlos los antifascistas acudieron a Usera, la Policía se encargó de cargar contra ellos brutalmente.
La Coordinadora Antifascista de Madrid denunció ese mismo día que “la Policía ha decidido proteger a los racistas cargando con porrazos y pelotas de goma. Durante esa carga otro antifascista más ha sido atacado por los agentes de la ‘Ley y el Orden’ que han procedido a detenerle posteriormente, negándole la asistencia médica hasta que toda la manifestación fascista hubiera podido pasar delante de él ridiculizando sus heridas e incluso tomando imágenes con sus teléfonos móviles”.

Con todo, los incidentes provocaron la disolución de la manifestación xenófoba a pesar de haber sido legalizada correspondientemente por las autoridades cómplices.

Pocos meses después, el 29 de febrero el partido neonazi Nación y Revolución convocaba, al grito de “Sieg Heil” y “menos locutorios, más crematorios”, un mitin electoral en la emblemática plaza antifascista de Tirso de Molina. Nuevamente la movilización contaba con el respaldo legal de las autoridades y la Policía sirvió de escudo para protegerla. Decenas de neonazis llegaron a la plaza escoltados por antidisturbios como si de una hinchada de fútbol se tratara. Cuando no habían pasado ni diez minutos, momentos en que vecinos del barrio y jóvenes del movimiento antifascista trataban de acceder a la plaza Tirso de Molina para repudiar el acto neonazi, la Policía se empleó con dureza y utilizó todo su material antidisturbios para reprimir a los antifascistas.

Los medios de comunicación muestran las imágenes de los incidentes que tuvieron lugar esa noche pero no hablan de los gases lacrimógenos que ahogaban a antifascistas y transeúntes, de las lunas de coches y escaparates rotos por los impactos de pelotas de goma policiales. Tampoco hablan de que un joven perdió un ojo por el impacto en la cara de un bote de humo y que tuvo que ser atendido por un vecino antes de la llegada del Samur.

Cuando la legalidad institucional ha permitido la actividad de grupos neonazis que fomentan el odio y la xenofobia, entonces la violencia policial ha sido un claro aliado para defenderles.
La gente que allí se dio cita, vecinos de Lavapiés y jóvenes antifascistas, lo hizo para responder a una provocación fascista dirigida tanto contra la gente nativa como extranjera. Sin embargo, se encontró con un muro de contención policial que dedicó todas sus fuerzas a proteger la actividad de los seguidores de Hitler.

Algo similar ocurrió el mediodía del pasado 1 de junio en la Puerta del Sol. Cerca de 200 antifascistas se plantaron en dicha plaza con pancartas antirracistas y anticapitalistas para protestar por una manifestación legalizada de los amigos del asesino de Carlos, el partido Democracia Nazional, que acabaría allí minutos después.

La Policía abrió paso a los neonazis a golpe de porra, acto represivo que la mayoría de los medios de comunicación no recogieron, limitándose a difundir los enfrentamientos posteriores.
En los últimos meses se han sucedido los programas televisivos que insisten en hablar de la violencia que ha existido en las protestas antifascistas. Pero en el debate sobre la violencia también hay que señalar a las Fuerzas de Seguridad del Estado que cuentan con total impunidad y cobertura mediática por parte del Estado. Son ellos quienes escoltan a los fascistas, los que maltratan a los compañeros en las comisarías, los que inician las cargas para permitir la actividad neonazi, los que dejan tuertos a los manifestantes con las pelotas de goma y los botes de humo.

Esta dinámica sin duda va a continuar, en tanto que la prioridad del Estado y sus medios de comunicación es impedir el desarrollo de un movimiento antifascista y anticapitalista que haga frente a la crisis económica y denuncie que la crisis es responsabilidad de la clase político-empresarial y no de la clase obrera (sea de aquí o de fuera) y, por tanto, no es ésta última quien tiene que hacerse cargo de ella.
Es por ello que está habiendo un aumento de la escalada represiva, como podemos ver en las huelgas que se están dando en el Estado español últimamente como son las de agricultorxs, pescadorxs, transportistas, etc.
El Gobierno ejecuta las reglas y la prensa es bondadosa con la protesta mientras se dé dentro de los márgenes permitidos por el propio sistema que genera las injusticias. La Policía se encarga de que quien se salga de este marco sea consecuentemente castigado.

De esta forma, respetando las raquíticas libertades del sistema, el obrero siempre pierde, a menos que plantee su lucha en términos de desobediencia organizada.
La juventud antifascista, hija de la clase obrera, se abre paso en la lucha anticapitalista poniendo topes a la proliferación del terrorismo neonazi y apoyando huelgas como la de limpiadorxs de Metro, participando en otras luchas laborales en sus centros de trabajo o en la defensa de los derechos básicos como la vivienda, la salud o la educación.

La Policía no es ni será “neutral”, aunque la prensa pretenda mostrar esa idílica versión de la realidad. La Policía está a las órdenes del Estado que gestiona la injusticia social existente, y entre los nazis y los antifascistas, así como entre el patrón y el obrero, tiene perfectamente designado cuál es su bando.

Madrid, 14 de julio de 2008

COORDINADORA ANTIFASCISTA DE MADRID

http://www.nodo50.org/antifa/index.php?option=com_content&task=view&id=324&Itemid=1

12 jul 2008

Retirada de simbología fascista en Pedro Bernardo (Ávila).

Por fin fue retirada de la iglesia de Pedro Bernardo (Ávila) la enome placa que exaltaba la figura de uno de los ideólogos del criminal golpe de Estado de 1936, José Antonio Primo de Rivera y a los vecinos del municipio que murieron luchando por el fascismo y contra el legítimo régimen democrático de la II República.

Ya por mayo, funcionarios del Ayuntamiento trataron de retirar la placa, pero tuvieron que desistir al encontrarse con la violenta reacción de varios vecinos, encabezados por el párroco de la localidad.

Esta iniciativa, impulsada por familiares de víctimas del terrorismo franquista de la zona del Tietar, fue aprobada en un pleno del Ayuntamiento, con los votos en contra de 4 concejales del Partido Popular.

De esta forma se retirá del pueblo uno de los últimos vestigios del franquismo, aún quedan el párroco y los concejales del PP.

++ Ver las imágenes como Fotogalería >>

http://castillasocialista.org/WordPress/?p=668

Antonio García Barón, El último anarquista español sobreviviente de la columna de Durruti.

Es el único sobreviviente de la columna anarquista de Durruti, que mantuvo a raya a las fuerzas franquistas durante la Guerra Civil Española (1936-1939).

Antonio García Barón vive en una casa baja, de ladrillo, cerca de una hilera de cabañas, en la selva boliviana. A sus 87 años de edad tiene que usar sombrero y gafas de sol.

Más tarde, nos cuenta que necesita protegerse los ojos dañados hace nueve años cuando bebió una taza de café que tenía veneno.

Afirma que fue uno más de los cien atentados contra su vida, que comenzaron en París, en 1945, adonde se trasladó después de pasar cinco años en el campo de concentración nazi de Mauthausen.
Los atentados continuaron en Bolivia, su hogar desde principios de la década de los años cincuenta.

Apátrida
Barón se muestra muy interesado en compartir sus puntos de vista sobre la historia española del siglo XX con una audiencia mayor.
"La prensa española oculta el hecho de que la Iglesia Católica fue responsable de la muerte de dos millones de republicanos durante la Guerra Civil, no de un millón, como se afirma", dijo Barón, antes de prorrumpir en otra de sus anécdotas.
"Le dije a Himmler (el jefe de las SS nazis) cuando visitó la cantera de Mauthausen, el 27 de abril de 1941, que los nazis y la Iglesia Católica hacían una gran pareja.
"Él respondió que era cierto, pero que -después de la guerra- les vería marchar con el Papa a la cabeza hacia allá, señalando el crematorio".

En una pared de la casa de Barón, hay una fotografía suya tomada en el campo de concentración. Junto a ella, un triángulo azul con el número 3422 y la letra "S" dentro, para marcar a los prisioneros considerados apátridas.

"España me quitó la nacionalidad cuando me internaron en Mauthausen. Querían que los nazis nos exterminaran en silencio. El gobierno español ofreció devolverme la nacionalidad, pero tengo que pedirlo y no me da la gana. ¿Por qué voy a pedir algo que me robaron a mí y a 150.000 compañeros?", dice indignado.
Barón llegó a Bolivia aconsejado por su amigo, el escritor anarquista francés Gastón Leval.

"Le pregunté por una zona poco poblada, sin adelantos como agua, luz y electricidad, donde aún se viva como hace un siglo atrás, porque donde hay civilización hay muchos curas".
En ese tiempo, unas 400 personas vivían en el lugar, en su mayoría indios guaraníes, y también un sacerdote alemán.

Fue un hueso duro de roer. Antes de que llegáramos ya se había enterado de nuestro viaje y dijo a la gente que éramos criminales. Los nativos huían de nosotros haciendo el signo de la cruz. Luego, al conversar con ellos, se dieron cuenta de que éramos buenas personas. Al cura le salió el tiro por la culata",.
Años más tarde, convencido de que el sacerdote lo seguía espiando, Barón decidió marcharse y crear un miniestado anarquista en medio de la selva, a unos 60 kilómetros de Buenaventura o a unas tres horas en bote por el río Quiquibey.

Con él iba su esposa boliviana, Irma, quien ahora tiene 71 años.

Comenzaron a criar pollos, patos y cerdos y a cultivar maíz y arroz, los que llevaban, dos veces al año, al pueblo para intercambiarlos por otros productos. Siempre rechazaban el dinero.
Dunkerque

La vida era dura y, hace algunos años, Barón perdió la mano derecha mientras andaba a la caza de un jaguar que rondaba su cabaña.

La pareja estuvo sola durante los primeros cinco años, hasta que empezaron a tener hijos. Más tarde, un grupo de unos treinta indios nómadas pasó por el lugar y decidió quedarse, a vivir de la caza y de la pesca, por
supuesto, sin utilizar dinero.

"Fueron años de libertad en todos los sentidos, nadie nos pidió permisos ni decían 'esto no lo toques'. Eramos independientes, no molestábamos ni nos molestaban. Podías caminar 200 kilómetros y no habrías encontrado un alma", recuerda Barón, mientras su mujer sonríe, sentada en una silla, al fondo de la sala.
Recientemente, tuvieron que trasladarse al pueblo por motivos de salud y, también, para estar cerca de sus hijos.

Viven con una hija de 47 años, mientras que sus otros tres hijos, Violeta, de 52 años; Iris, de 31, y Marco Antonio, de 27, trabajan en España.

Ahora, comparten los modestos cuartos construidos alrededor de un patio interno, con tres doctores cubanos que forman parte de un contingente enviado a dispensar cuidados médicos en Bolivia.
Las horas van pasando y ya es la hora de tomar el avión de regreso a La Paz, antes de que la lluvia torrencial vuelva a dejar el área aislada.

Es el momento que elige Barón para comenzar a hablar en detalle sobre Mauthausen y la guerra, como si quisiera cumplir una promesa hecha a sus camaradas caídos.
Cómo los nazis despeñaban prisioneros, cómo algunos de ellos se aferraban a la malla metálica para evitar una muerte inminente, y cómo los judíos eran el blanco del trato más despiadado, y no vivían mucho tiempo.

La memoria lo lleva de vuelta a Dunkerque, donde llegó en 1940, antes de ser aprehendido y enviado a Mauthausen.

"Llegué por la mañana pero la flota inglesa ya estaba a unos seis kilómetros de la costa. Pregunté a un joven inglés si volverían".
"Veo que come con una cuchara en la mano y dispara su cañón antiaéreo con la otra y así todo el tiempo", dice, riendo a carcajadas.
"'Comé si quieres', le dije. '¿Sabes usarla?"', me preguntó al ver que yo era muy joven -tenía sólo 17 años- y que no llevaba uniforme militar".
"'Déjela en mis manos', le dije. Tomé la ametralladora y derribé dos aviones y me miró asombrado. '¿Dónde has aprendido?' me preguntó. Al final me regaló la cuchara con la que comía y la tuve hasta regresar de Mathausen".

"Nunca olvidaré la entereza con que combatían los británicos varados en la playa".

KaosenlaRed

Sellada la sede de Falange Española a 8 meses del asesinato de Carlos Palomino.

Antifascistas madrileñxs realizaron pintadas, arrojaron propaganda y sellaron con soldadura en frio y material aislante la entrada a la sede de Falange Española, situada en la calle Silva.

Comunicado:

El dia 11 de julio de 2008, cuando se cumplen 8 meses del asesinato de nuestro compañero y amigo Carlos a manos del neonazi militar Josué, respondemos a una nueva provocación, esta vez proveniente de Falange Española. El pasado 12 de abril amanecimos con la noticia de que la placa en homenaje a Carlos, colocada por el movimiento antifascista en Legazpi, había sido destrozada. Días después, los restos de la placa fueron encontrados en el coche de Manuel Andrino Lobo, secretario general de la organización Falange Española, demostrándose que el fascismo no respeta ni a los muertos, ni el dolor de sus amigxs y familiares.
Este falangista ha contado como abogado con Ricardo Sáenz de Ynestrillas (neonazi implicado en un asesinato, varias palizas y tráfico de drogas), cuando lo ha necesitado.

La Falange Española, fascista y sin ánimo de ocultarlo, pretende mostrar siempre su lado más legal que hasta ahora como partido tiene manteniéndose al margen de las acciones de este tipo. Pero esta vez se ha visto que los objetivos y el lado que como todxs lxs de su calaña tienen, entre ellos atacar y destrozar un símbolo que para todxs lxs antifascistas compañerxs y amigxs de Carlos, supuso al colocar esta placa como homenaje por su asesinato.

Por eso hoy respondemos a Falange Española con el mensaje de que EL MEJOR HOMENAJE a Carlos es CONTINUAR LA LUCHA ANTIFASCISTA y ANTICAPITALISTA. Que cuantas veces se quite la placa, tantas veces la volveremos a colocar y tantas veces rastrearemos a lxs culpables.

Y que como siempre decimos y seguiremos diciendo, NI OLVIDAMOS NI PERDONAMOS. Han puesto a prueba nuestra fuerza de lucha por lo nuestro y por lxs nuestrxs una vez más, en este caso atreviéndose a hacer referencia a un compañero asesinado por FASCISTAS con diferentes siglas pero que vienen a ser la misma escoria cómplices unxs de otrxs.

Pero ni antes ni mucho menos ahora con todo l oque llevamos ganado vamos a dejarlxs respirar tranquilxs, porque cuantas más veces crean que nos han hecho caer, con más fuerza nos verán levantarnos.

Carlos, va por ti, porque nosotrxs no olvidamos ni perdonamos.

El mejor homenaje, continuar la lucha.

http://www.lahaine.org/index.php?blog=2&title=sellada_la_sede_de_falange_espanola_a_8_

10 jul 2008

Denuncian torturas en la comisaría de Hortaleza.

Siete agentes de la Policía Nacional han sido imputados por golpear a dos jóvenes el año pasado. Recientemente otros vecinos han denunciado públicamente golpes y vejaciones policiales.

En la comisaría de la Policía Nacional del distrito de Hortaleza, en el noreste de Madrid, hay un cuarto de torturas, una sala sin videovigilancia donde los detenidos son golpeados. Es lo que se deduce de los testimonios de Germán Peña, Eduardo Gómez, Hugo López y Óscar Díaz, que denunciaron públicamente en los micrófonos de Radio Enlace, radio comunitaria del barrio, haber sido maltratados física y psicológicamente por agentes del Cuerpo Nacional de Policía. Estos casos, que coinciden en numerosos detalles y que han sido denunciados judicialmente, se produjeron tras una detención violenta y arbitraria.

Germán y Eduardo fueron detenidos la noche del 27 de enero de 2007 cuando dos agentes sorprendieron a este último orinando en la calle. “Nos llevaron al coche esposados y cogidos por los testículos a pesar de que no opusimos resistencia. La gente que estaba por allí también fue amenazada por la policía, una amiga intentó hacer fotos con el móvil y un agente le obligó a guardarlo porque de lo contrario le aseguró que se lo estamparía”. Así recuerda Germán los momentos previos al traslado a comisaría acusados de agresión y resistencia a la autoridad. Allí serían golpeados en una sala que define como “el Guantánamo de Hortaleza, donde no hay cámaras y te zurran todos. Después de que nos pegasen, cuando abrimos los ojos vimos que la sala estaba llena de sangre. Un policía avisó que llegaba el Samur y otro se puso a fregar. La sala la tienen completamente alicatada para limpiarla cuanto antes y no dejar rastro”.

Los dos jóvenes permanecieron retenidos e incomunicados durante varias horas. Ambos presentaban diversas lesiones. Germán necesitó asistencia médica urgente al sufrir fisura de tibia y daños en los ligamentos cruzados de la rodilla. Ante la repercusión de este caso de torturas, el pasado 27 de febrero, el comisario jefe de Hortaleza dio a conocer en la Junta de Distrito la versión policial de los hechos. Aseguró que durante la detención de ambos jóvenes en comisaría se “cumplió rigurosamente la normativa establecida”. Sin embargo, el juez que investiga el caso ha considerado veraces los testimonios de los agredidos y solicitó el testimonio en el juzgado de siete policías a los que imputó un delito de torturas.

Pese a ello los métodos de los agentes de esa comisaría no parecen haber variado. En las últimas semanas se han producido dos nuevos casos de maltratos. Óscar Díaz, que paradójicamente es policía municipal, ha denunciado que en la noche del 24 de abril, tras exigirle la documentación, fue agredido por dos agentes de la Policía Nacional vestidos de paisano cuando regresaba de cenar con unos amigos. Luego fue trasladado a comisaría donde permaneció detenido varias horas y fue nuevamente golpeado. “Moralmente te destruyen, te anulan como persona, es lo más duro aparte de la agresión. Te traumatiza de tal manera que dejas de ser una persona libre para sentirte constantemente acorralado”, declaró Óscar, que está en tratamiento psiquiátrico.

Ha sido denunciado por resistencia a la autoridad. Unas semanas después, el 1 de junio, Hugo López regresaba conduciendo a su domicilio, muy próximo a la comisaría de Hortaleza, cuando atravesó un paso de cebra sin percatarse de la presencia de dos individuos dispuestos a cruzar que se lo reprocharon. Hugo contestó con vehemencia. Eran dos policías ‘secretas’ que, ofendidos, le persiguieron y le sacaron violentamente del vehículo.

“Como te vuelvas a pasar un paso de cebra te vamos a pegar dos tiros”, espetó uno de los agentes antes de trasladarle a la comisaría. Hugo también sufrió golpes y amenazas en la sala alicatada, y tras pasar algunas horas en el calabozo quedó en libertad con contusiones, cervicalgia y una denuncia por conducción temeraria. Por si fuera poco no ha recuperado unas gafas valoradas en más de 100 euros que desaparecieron de su vehículo tras el registro policial.

Desalojo de parque a golpes Sin embargo en Hortaleza, no sólo policías nacionales recurren a la violencia indiscriminada. Según denuncian los vecinos, el 9 de junio de 2007 decenas de agentes de la policía municipal adelantaron el fin de las fiestas de Hortaleza desalojando a la fuerza a los cientos de vecinos que se encontraban en el parque Pinar del Rey, provocando además varios heridos. La policía había acudido para resolver una pequeña reyerta en el auditorio del distrito, pero acabó vaciando el concurrido parque en apenas unos minutos.

Antonio Perales, máximo responsable de la policía municipal de Hortaleza, justificó la desproporcionada intervención afirmando que en la reyerta “había 5.000 personas organizadas y armadas con puños americanos, bates de béisbol, katanas, navajas y estiletes”. Añadió que la policía “no llegó a cargar, sino que contuvo la agresión”, y que si no “hubiera ardido el auditorio”.

http://diagonalperiodico.net/spip.php?article6294

El movimiento antifascista de Madrid y la “teoría de los dos demonios”.

El gobierno y los medios de comunicación empresariales pretenden aislar al movimiento antifascista tachándolo de “demonio” e igualándolo a otro demonio, los nazis. Esta forma de represión no es nueva ni ha sido inventada en el estado español.

Según Wikipedia, se le llama “teoría de los dos demonios”, habitualmente en forma despectiva, a la concepción según la cual los actos de violencia y terrorismo perpetrados por las Fuerzas Armadas pro-imperialistas durante la dictadura argentina (1976-1983) son totalmente comparables a las acciones de las organizaciones guerrilleras revolucionarias, como Montoneros y el Ejército Revolucionario del Pueblo. Según esta concepción, las acciones de cada bando no sólo afectaron al que decían combatir, sino a ciudadanos “inocentes” que no hacían uso de la violencia.

Esta concepción pretende negar la existencia de la lucha de clases, avalando la tesis de que dos supuestos “bandos” se disputaban no se sabe qué oscuro poder entre sí y que la “ciudadanía” era víctima de tal enfrentamiento.

Cuando un reducido sector social (el ejército), financiado y armado por gobiernos capitalistas, pretende reprimir a un sector social mucho más amplio con objetivos de transformación social y con raíces populares, entonces no existe ningún supuesto enfrentamiento estéril entre “bandas”, lo que hay es lucha de clases: sectores sociales que luchan en beneficio de la clase dominante contra sectores sociales que luchan en beneficio de la clase dominada. No hay una supuesta “ciudadanía” que está en medio porque no se puede estar en medio entre explotadores y explotados. Esta es una excusa política que ofrecen los medios de comunicación para legitimar la democracia burguesa “superadora de los extremismos” y criminalizar a quienes luchan.

Esto mismo ocurre en Colombia. El narcogobierno asesino y pro-imperialista de Uribe, hace gala de su supuesta intención de “poner orden” entre los paramilitares (apoyados bajo cuerda por el ejército oficial colombiano) y las guerrillas revolucionarias. El discurso mediático del gobierno sostiene que ambos grupos armados son “demonios” que hay que contener porque su actividad “afecta a la sociedad civil”, que es víctima de un conflicto que teóricamente le es ajeno. Sin embargo, mientras los paramilitares son nutridos por recursos norteamericanos y gubernamentales, las guerrillas revolucionarias son nutridas por sectores populares fundamentalmente campesinos y de los sectores urbanos más pobres. El origen de la represión paramilitar se sitúa en la clase dominante y el origen de la resistencia guerrillera se sitúa en la clase dominada, es decir, en el pueblo. No hay por tanto una “sociedad civil” que está en medio; lo que hay es una enorme mayoría de vendedores ambulantes, campesinos, obreros, desempleados, desplazados..., que son víctimas de los paramilitares y por su condición de pobres, representan el apoyo natural y semillero de las organizaciones guerrilleras.

El concepto de “sociedad civil” es asumido por determinados organismos antiglobalización como ATTAC, ONGs y los foros sociales mundiales, que intentan aplicar a su manera la teoría de los 2 demonios, diciendo que la “sociedad civil” está en medio de los gobiernos, el estado y las empresas multinacionales por un lado; y las organizaciones de la “izquierda radical y armada” por otro. Se clasifican a sí mismos de “sociedad civil” cuando curiosamente son los que tienen más facilidades para aparecer en la prensa burguesa y ser tratados mediáticamente con benevolencia.

La situación actual en Madrid

Extrapolando esta teoría latinoamericana a la actualidad madrileña, por supuesto salvando todas las distancias necesarias, hay algo que podemos rescatar para nuestro análisis: de un tiempo a esta parte los medios de comunicación pretenden calificar al movimiento antifascista de demonio y de esta manera igualar su accionar a la de otro demonio, los nazis.

Alcorcón (febrero de 2007) se intentó algo similar. Después de una pelea juvenil puntual, la prensa creó una situación de alarma intentando generar un “brote xenófobo”, azuzando la llegada de neonazis a la localidad. Cuando la juventud antifascista de Alcorcón salió a la calle para responder a la manipulación mediática y a dejar claro que los nazis no eran bienvenidos, entonces la prensa empezó a difundir que había una supuesta "guerra" entre violentos de distinto pelaje (sudacas, rojos, ultraderechistas) y todo transcurriría en los suburbios (supuesta zona violenta). Por su parte el Estado, la prensa y los ciudadanos de bien mirarían con preocupación el desarrollo de los acontecimientos... según ellos, la única “solución” sería enviar mucha policía al lugar para “garantizar la seguridad del vecindario”.

Es decir, cuando la juventud antifascista hizo frente a la manipulación de los medios de comunicación y a su fuerza de choque alegal (los nazis), entonces de pronto la prensa utilizó la estrategia de convertir a ambos “bandos” en demonios, salvando la imagen de las instituciones demócratas y burguesas, y tratando de colocar al vecindario de Alcorcón como “víctima de un conflicto que no ha elegido”. De esta manera, se intentaba aislar a los verdaderos protagonistas de la solución del conflicto: la juventud autoorganizada de Alcorcón, que fue quien impulsó la movilización contra el racismo, contra la manipulación mediática y por la convivencia pacífica.

El gobierno y los medios de comunicación suelen hacer la vista gorda ante el grueso de las agresiones neonazis por dos claras razones: en primer lugar, porque la ultraderecha madrileña tiene su origen en las instituciones herederas del franquismo, en la policía, el ejército, en las hinchadas de los grandes y adinerados clubes de fútbol. Y en segundo lugar, porque cumplen la función de las bandas paramilitares en Sudamérica o de las juventudes hitlerianas en la Alemania nazi, es decir, utilizan medios violentos para impedir la autoorganización de la gente por fuera de las instituciones.
Sin embargo cuando no les queda más remedio, es decir, cuando la soberbia neonazi no se puede seguir ocultando, o cuando a uno de los partidos burgueses le conviene atacar políticamente al otro por una cuestión electoralista, entonces denuncian a las bandas nazis pero -no perdamos de vista- nunca de forma individual. Siempre hablan de “los extremismos”, “los violentos”, metiendo en un mismo saco a neonazis y antifascistas. Por algo el PSOE se autoclasifica de “centro-izquierda” y el PP de “centro-derecha”, con lo que queda claro que el resto son “extremismos”.

El movimiento antifascista, al contrario que el nazismo post-franquista, tiene su origen mayoritariamente (no sólo) en los humildes barrios obreros del sur de Madrid, donde mucha gente vive ahogada por las hipotecas, por la privatización de los servicios básicos y sin salarios suficientes para enfrentar con tranquilidad la llegada del fin de mes. Así, el movimiento antifascista se nutre de una juventud subempleada y alejada del romántico mileurismo, sin acceso a los paraísos que promete la publicidad comercial de este llamado “primer mundo”.

En definitiva, una juventud hastiada de tragar con la injusticia social imperante.

El gobierno de Madrid gasta dinerales en construir la M30, en enterrarla aunque los supuestos parques y jardines que iban a beneficiar a la población brillan por su ausencia. Gasta en autopistas para beneficiar a las empresas de automóviles. Gasta en construir parques como el Juan Carlos I, “uno de los mas relevantes por su extensión y moderno diseño”, en el noroeste rico de Madrid y donde se construyen nuevos centros feriales para las grandes empresas. Gasta en equipar con elementos represivos a las diversas policías. Gasta en recursos e instalaciones para el Tren de Alta Velocidad, en un canal de televisión autonómico para hacer publicidad de la linea política de turno... Las clases medias acomodadas y altas, se pueden pagar escuelas y universidades para sus hijos, gimnasios, centros hospitalarios y seguridad para sus urbanizaciones. Mientras tanto, las clases menos favorecidas difícilmente pueden acceder a las pocas universidades estatales y mucho menos pagarse las privadas, tienen que aguantar el calor y el polvo, sufrir la degradación de los servicios sanitarios y educativos en proceso de privatización, los escasos parques y equipamientos deportivos.

La rebeldía nace de la injusticia y la desigualdad. Por tanto hay que destruir la teoría mediática de los dos demonios, hay que plantear firmemente la realidad: no son reyertas, es lucha de clases.

Los nazis no son una “tribu urbana”, son grupos que pretenden aterrorizar a los inmigrantes y a todo tipo de sector social que cuestione el orden existente desde una posición izquierdista. Son, por tanto, una excelente herramienta del capitalismo. Los nazis les vienen como anillo al dedo a los poderosos para que se pringuen menos a la hora de amedrentar a los movimientos sociales, ya que no se trata de una represión legal ni oficial pero su consecuencia es la misma.

www.nodo50.org/antifa

Carta de Mavi (madre de Carlos Palomino): ¿Dónde está mi entrevista?.

La presentadora de televisión Mercedes Milá entrevistó a Mavi, madre de Carlos Palomino, para su reportaje "Diario de... Los extremos se odian" ([1], [2]), emitido el pasado 19 de junio. Después de ver el reportaje Mavi realizó unas incisivas aclaraciones a través de una carta que publicamos para apoyar su pedido de difusión.

[Carta de Mavi, 20 de junio de 2007]

¿Dónde está mi entrevista?

Bien, después de enfriar un poquito mi ira, aunque no en su totalidad, voy a exponer algo sobre el "Diario de", que se emitió anoche, lo primero es que me siento totalmente engañada (no manipulada), porque tengo que reconocer, que nada referente a mi entrevista fué manipulado, simplemente CORTADO, VETADO, INEXISTENTE, por lo que me pregunto yo, ¿DÓNDE DEMONIOS ESTÁ MI ENTREVISTA?

¿DóNDE ESTÁ LA DEFENSA Y LA DENUNCIA PÚBLICA QUE YO GRABÉ?

¿DÓNDE ESTÁ LA ENTREVISTA QUE HICIERON A LOS AMIGOS DE CARLOS?

¿POR QUÉ INFILTRARON A UNO ENTRE LOS ANTIFASCISTAS?

¿POR QUÉ NO INFILTRARON A OTRO ENTRE LOS NEONAZIS?

¿CÓMO PUEDEN SACAR LA ENTREVISTA DE UN IMPRESENTABLE COMO ESE ABOGADO, PERTENECIENTE A 'NACION Y REVOLUCIÓN' Y PERMITIRLE QUE DIGA ESA CANTIDAD DE BARBARIDADES Y NO TENER HUEVOS PARA DECIRLE MENTIROSO EN SU CARA?

Ahora y después de analizar un poco, veo la realidad, MI ENTREVISTA NO ERA PROCEDENTE QUE SALIESE, ERA DEMASIADO PELIGROSA PUESTO QUE INCULPABA AL GOBIERNO, DELEGACIÓN DE GOBIERNO, TRIBUNAL SUPREMO... en esa entrevista clara y abiertamente criminalizaba a los nazis, y a sus defensores que los apoyan y dan cobertura para que sigan realizando sus matanzas, en esa entrevista claramente dije que eran LOS SICARIOS DE LOS QUE ESTÁN EN EL PODER, y por ello no les interesa ilegalizarlos ni criminalizarlos, porque son los que hacen el trabajo sucio de los señores que salen con sus cortes a navaja de pelo, y sus bonitos trajes...

¿Por qué no sale mi denuncia pública, que dirijo directamente al Ministro del Interior Sr. Rubalcaba, cuando en el primer mes todo fueron buenas palabritas pero total incumplimiento de ellas?. ¿Por qué no sale que directamente había pedido al ministerio del interior que el caso de Carlos fuese juzgado por un acto terrorista, puesto que lo contempla el código 577 de lo penal, y lo deniegan diciendo que no encuentran indicio de tales hechos, lavándose las manos y remitiéndote al Supremo, para retrasar el juicio lo más posible cuando el penal lo tiene reconocido?.

¿Por qué no sale la acusación que hice al Manos Limpias, por pedir la ilegalización de la Coordinadora [Antifascista], cuando su presidente es el que debería estar fuera de juego, por tener las manos completamente manchada de sangre?.

¿Por qué no sale la defensa que hice de los antifascistas por sus trabajos y sus reconocimientos dentro de la legalidad al considerar personalmente que tenían todo el derecho a estar legalizados, puesto que sus únicos crímenes eran luchar contra las injusticias que se estaban llevando a cabo, entre la inmigración, los trabajadores, la explotación y los derechos humanos?.

¿Por qué siempre buscaban la igualdad entre ambos grupos cuando la realidad eran las diferencias bien marcadas que existían entre ambos, y la más principal y que yo pedía, que tuvieran el coraje de callarme la boca presentándome un listado de los muertos asesinados por el antifascismo y los realizados por los nazis?. ¿Por qué no sale que pido que sean catalogados como terroristas como son las víctimas de AVT?, ¿qué ocurría, que los policías, guardias civiles, concejales y militares, sus vidas eran más importantes que la de mi hijo y la de los demás caídos en el movimiento antifascista?

Para mi eran igual de importantes, eran víctimas caídas a manos de unos terroristas que no respetan la vida, me da la mismo que ideología política defienda, TERRORISMO ES AQUEL QUE NO RESPETA LA VIDA DE NINGUNA PERSONA SIMPLEMENTE POR IDEOLOGÍA POLÍTICA, SEA DE DERECHAS O IZQUIERDAS...


¿Y por qué las víctimas del antifascismo no eran reconocidas, ni ayudadas como lo son las víctimas de AVT?. ¿Por qué se molestan porque algunos partidos antifascistas no les dan su condena por esas victimas?. Y yo me pregunto, ¿por qué la AVT aun no se ha dignado a condenar la muerte de mi hijo y la de muchos antifascistas anteriores?, ¿son de más categoría los suyos?

Señores, abramos los ojos y veamos la realidad de lo que nos quieren vender, nos quieren tener como hace 50 o 60 años, quieren volver a tener el poder, que a estas fechas no han terminado de asimilar que el FASCISMO Y EL NAZISMO ya son historias pasadas, muertas y enterradas, aunque la cruda realidad es que entre bastidores siguen actuando con total impunidad. ¿Por qué en la cuna del fascismo están prohibidas todo tipo de manifestaciones neonazis y aquí que somos tan "tolerantes" las seguimos autorizando? y denegando todas aquellas de los movimientos antifascistas que luchan por la verdad?. ¿Por qué no sale mi condena personal a la Señora Soledad Mestre, a la que acuso entre las cámaras de que gracias a su permisividad y autorización a aquella concentración del 11.11.07 a DN, mi hijo está muerto?.

Toda responsabilidad de la muerte de Carlos la hago recaer sobre ella, si esta persona no hubiese consentido aquella manifestación racista, hoy mi hijo seguiría vivo, puesto que aquel elemento que lo asesinó no hubiese pedido permiso en su cuartel para ir a una concentración patriota y jamás se hubiese cruzado con mi hijo...
¿Por que interés que yo no llego a alcanzar a comprender, siguen insistiendo en lo de una pelea entre bandas, o en la reyerta?, ¿a qué tienen miedo?. ¿Por qué están retrasando tanto su juicio si está todo clarísimo y el vídeo habla por si sólo?

Bueno aquí tenéis una pequeña síntesis de lo que consistió la entrevista con la Milá, y que ha sido totalmente vetada... después de tanta insistencia por su parte de que se la diera, ¿qué ocurre, que se encontraron con un muro que no iban a poder manipular ni llevar por donde ellos deseaban? Lo siento, y así seguiré... Ahora si acontece que tenga que hacer alguna otra aclaración será en DIRECTO, no habrá grabaciones de ningún tipo... Su programa me ha defraudado muchísimo.


Ha mostrado a ambos lados, sí, de acuerdo, pero no ha mostrado la realidad de ambos. En el antifascismo, violencia, más violencia y más, pero ¿por qué no dicen por qué?. Porque no se les permite expresarse libremente, la primera respuesta que reciben siempre es una carga policial, ordenada por los altos mandos y a la que ellos se tienen que defender para no terminar, seguramente, brutalmente golpeados, como ocurrió en la última de Sol [1 de junio], para no terminar con los ojos sacados por una pelota, como ocurrió al chaval de Tirso [29 de febrero], etc...

Al señor policía que salió hablando perteneciente al sindicato de los mismos, le digo, ¿ya abandonó usted su ideología neonazi?. Yo aun le recuerdo por el asesinato de una chiquilla de 17 en el Instituto Tirso de Molina, ¿lo olvidó?. Revise su historia señor defensor de Asesinos.

La verdad es siempre muy poderosa, peligrosa sí, pero poderosa, y ante la verdad no hay rebatimientos... y yo hablo con la verdad, mi verdad, y es la que seguiré gritando hasta que me quede sin voz... Se pierde un combate, pero la batalla aún está en el campo... y yo sigo en pie, por lo tanto continuo y continuaré el camino que a mi hijo le cortaron de una forma u otra...

Ahora sacad vuestras conclusiones, y el sentimiento de defraudación que en estos momentos puedo tener, acompañado de mucho más dolor y mucha más rabia, cosa que me darán la fuerza suficiente para seguir adelante... Ahora más que nunca Mavi empezó a hablar y sólo existe una forma de hacerla callar... si son tan valientes, aquí estoy.

CARLOS, POR TI Y POR LO QUE ASESINARON, POR SER ÍNTEGRO Y JUSTO, SEGUIRÉ AQUI... TE AMO... 2007